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sábado, 15 de enero de 2011

Editorial

Aunque aula 25 nace por petición expresa de algunos alumnos del curso 1BS2 del IES La Rosaleda, no es una revista escolar (es decir, no pretendemos ceñirnos a cuestiones de nuestro centro, si bien tampoco se descartan) ni un proyecto cerrado. Muy al contrario, nos gustaría que, abierta a la comunidad educativa del IES La Rosaleda, toda ella participara.


Por otra parte, cada firmante de un artículo es, en exclusiva, responsable de las opiniones en él vertidas.


Sólo nos queda, pues, agradecerte la visita e invitarte a que comentes los artículos. Recuerda que un blog es un medio bidireccional y que se enriquece con los comentarios de sus lectores.



¡¡Muchas gracias otra vez y bienvenido!!

El cementerio de Praga, de Umberto Eco

Praha Jewish Cemetery 2003b
Siempre hemos sabido que por debajo de la gran corriente de la Historia oficial fluye el sucio arroyo de las intrigas y los móviles políticos, de clase o personales, y que junto a las grandes mentiras de destrucción masiva se mueven oscuros intereses económicos; o que tras las peligrosas conspiraciones judeo-masónicas y del terrorismo internacional podemos atisbar la necesidad de las estructuras de poder de crear un enemigo fácilmente reconocible y aglutinador, del cual nos defenderán esas mismas estructuras y en las que debemos confiar para que nos libren del mal, amén.

Y porque sabemos eso es por lo que no nos sorprenden las revelaciones de Wikyleaks o los documentales y textos de Michael Moore, salvo por los detalles concretos, las pruebas irrefutables o la insultante desvergüenza de algunos personajes.

Es con esos materiales con los que juega Umberto Eco en su última novela, haciendo que su personaje, Simone Simonini, participe activamente, aunque siempre en la sombra, en algunos importantes acontecimientos históricos de la segunda mitad del siglo XIX: desde la lucha unificadora de Garibaldi hasta el caso Dreyfus, pasando por la guerra franco-prusiana o los sucesos de la Comuna de París. Todo ello presentado en el mejor estilo del folletín decimonónico.

Pero su personaje no es más que el brazo ejecutor al servicio de intereses de instancias superiores, ya sean los servicios secretos franceses, el espionaje ruso, el papa o la compañía de Jesús; y allí donde la Historia deja un hueco, cuela Eco a su personaje, haciéndolo bajar a las cloacas tanto metafóricas como reales.

Papel fundamental juega Simonini en las difamaciones y consecuentes persecuciones a los judíos, masones y jesuitas, en especial a los primeros, convirtiéndose en responsable inicial del manifiesto antisemita conocido como Los protocolos de Sión, de amplia difusión en la alemania nazi. Aunque, en realidad, el escrito que confecciona Simonini a lo largo de la novela, y de cuya escena inicial deriva el título de la misma, sirve tanto para difamar a jesuitas, como a judíos o a cualquiera que se ponga por delante, haciéndolos responsables, sucesivamente, de grandes y terribles complots universales.

Es decir, aunque el objeto de estos ataques pueda ser intercambiable, lo importante es ofrecer un enemigo que reúna las más aberrantes inclinaciones (asesinatos de niños a manos de los judíos, apuñalamiento de hostias en el rito de iniciación masónico…), así como los más terribles objetivos.

No deja de sorprender, en cualquier caso, que todos los hechos y personajes de la novela, a excepción del protagonista y alguno secundario, son totalmente reales, como indica el propio autor en nota final, y está bien recordar, en ese sentido, el contenido de alguna encíclica papal, o de aquellos textos que advertían de complots urdidos por los enemigos del trono y el altar, o la sangrienta represión de los incipientes movimientos sociales de entonces.

Estamos, pues, ante la sexta y mejor novela, junto a El nombre de la rosa, de un autor cuyo mensaje, como el de Assange y los suyos, no por conocido o intuido, se hace menos necesario.



Rafael Martín.
rafamarting@gmail.com

Entre Lobos

El pequeño Marcos, nació en 1946 en una familia muy humilde de un pequeño pueblo de Córdoba. Era común en aquellos años, en los que la miseria y la penuria reinaban en el ambiente, el que las familias tuvieran que vender a alguno de los hijos para que éstos cuidaran los rebaños de los "ricos".

Es así como Marcos es vendido a un pastor que le enseña todo lo necesario para poder vivir en un lugar como aquel. Tras la muerte del pastor, el niño vivie doce años entre animales, especialmente entre lobos. Arrestado y enviado al ejército, nunca llegó a adaptarse al medio urbano y siempre quiso volver al lugar dónde se crió.

Esta espeluznante historia real, ha servido para que Gerardo Olivares dirigiera en el año 2010 Entre lobos, película que a nadie dejará indiferente. Con un enorme despliegue de imagénes y sonidos, se puede conocer un poco más a fondo la naturaleza de Córdoba, así como la belleza de las especies animales, que tanta importancia tienen en esta película. De una manera clara y directa se nos muestra la realidad y las condiciones de vida de aquellos alejados pueblos de la bella capital andaluza, así como el tipo de lenguaje y de indumentaria.

Un gran trabajo realizado por todo el equipo que ha hecho posible que muchos de los espectadores nos emocionemos, y por qué no decirlo, nos riamos en determinado momentos con algunas escenas de la película. Y todo ello de la mano de grandes actores como Eduardo Gómez, Luisa Martín o Carlos Bardem.






Ficha (fuente: IMDb)

Director: Gerardo Olivares.
Guionista: Gerardo Olivares.
Reparto: Carlos Bardem, Juan José Ballesta, Dafne Fernández, Sancho Gracia, Álex Brendemühl, Eduardo Gómez, Vicente Romero, Antonio Dechent, Luisa Martín, Manuel Camacho, José Chaves, José Manuel Soto, Francisco Conde, Agustín Rodríguez López.
País: España y Alemania.
Fecha de realización: 26 de Noviembre de 2010.
Localización: España.
Producción: Sophisticated Films y Wanda Visión S.A.

Biblioteca Clásica de la Real Academia Española

Sede de la Real Academia Española
El pasado 4 de enero la RAE publicó un comunicado en el que informaba de que a partir de Febrero, y en colaboración con la Fundación la Caixa, comenzará la publicación de una Biblioteca Clásica que aglutinará las mejores obras de la literatura española e hispanoamericana desde sus orígenes hasta el siglo XIX.

La noticia ya de por sí es buena. Lo que, desde mi punto, de vista la hace excepcional es que, paralelamente, se añadirá una versión digital de libre acceso (interpreto: gratuita). Eso sí, editados tan solo con un breve prólogo y notas (la versión en papel -y naturalmente de pago- ofrecerá un texto crítico depurado de cada obra, con anotaciones y estudios complementarios que enriquecerán su lectura: poderoso caballero es don Dinero).

Este hecho trae hasta nuestra palestra una cuestión que se anda discutiendo desde hace al menos un año, cuando los reproductores de libros electrónicos parecía que iban a ser el boom de las pasadas Navidades: ¿estamos ante el final del libro en papel?

Yo, por mi parte, he de confesar que desde hace años -y excepto muy contadas ocasiones- sólo leo textos digitalizados.

¿Y tú? ¿Qué piensas? Dinos lo que crees al respecto en los comentarios.

Fuente de la imagen: Wikimedia.

Gala de entrega del Balón de Oro

La gala tuvo lugar en Zúrich (Suiza ) el 10 de Enero de 2011 a las 19:00 horas.

En primer lugar, se dio a conocer el once ideal de la FIFA, formado por:
  • Portero
    • Iker Casillas (Real Madrid)
  • Defensas
    • Maicon (Inter de Milán)
    • Gerard Piqué (F.C. Barcelona)
    • Carles Puyol (F.C. Barcelona)
    • Lúcio (Inter de Milán)
  • Centrocampistas
    • Xavi Hernández (F.C. Barcelona)
    • Wesley Snejider (Inter de Milán)
    • Andrés Iniesta (F.C. Barcelona)
  • Delanteros
    • Lionel Messi (F.C. Barcelona)
    • Cristiano Ronaldo (Real Madrid)
    • David Villa (F.C. Barcelona)

Como habréis observado el once perfecto está compuesto por jugadores que pertenecen al F.C Barcelona, Inter de Milán y Real Madrid ( seis, tres y dos respectivamente).

El siguiente acto tuvo lugar en torno a las 19:30 horas. España se quedó con las manos vacías en el premio al Técnico del Año, en el que el portugués José Mourinho superó a Vicente del Bosque y Pep Guardiola. Fue la primera vez que se entrega un premio al mejor entrenador y, en este caso, Mourinho se impuso en una temporada en la que logró un inédito triplete de títulos al mando del Inter de Milán.

Del Bosque llevó a España a su primera Copa del Mundo, mientras que Guardiola guió al Barcelona al título de la Liga Española y Supercopa de España, títulos que no sirvieron a ninguno de los dos para optar a este galardón.

En tanto, el fútbol de Haití recibió el premio al “fair play” o juego limpio al recuperarse del terremoto que devastó la isla en enero del año pasado.

Acto seguido, se supo el nombre del jugador cuyo gol había sido elegido el mejor del año. Ese premio correspondió a Hamit Altintop, jugador turco que milita en las filas del Bayern de Munich.

Lionel Messi 2009

Sobre las 19:55 el entrenador del F.C. Barcelona daba conocer el nombre del mejor jugador del año que, coincidencia o no, tampoco se lo dieron a un jugador español, como habían vaticinado todos los diarios del mundo. El nombre del elegido fue Lionel Andrés Messi, del que todos hablan como un dios del fútbol o el heredero del “Pelusa”, Diego Armando Maradona.





Esperamos que os haya gustado nuestra sección deportiva. El mes que viene volverá cargada de nuevas noticias sobre el mundo del deporte.



Rubén Ágreda y Jesús Alcoholado.

Pasión de leer

A finales de Diciembre, leí en clase junto con mis alumnos del 1BM el ensayo Pasión de leer, de Gabriela Mistral.



En él hay una frase que plantea uno de los actuales debates en la edublogosfera: el de si son convenientes o no las lecturas obligatorias.

La frase en cuestión es la siguiente:

Yerran los maestros que, celando mucho la calidad de la lectura, la matan al imponer lo óptimo a tirones y antes de tiempo.

Como el tema me parece relevante y que incumbe a los alumnos, les pedí que me dieran su opinión (en unas diez líneas) sobre el asunto. A continuación reproduzco algunos de los textos.


Laura Ramírez:

Personalmente tengo dos opiniones:

La primera, es que veo bien que los profesores nos obliguen a leer, porque si no creo que ninguno de nosotros sabríamos escribir o leer (periódicos, revistas, libros de textos, los subtítulos de una película, etc.) Aunque yo sé que de vez en cuando, o incluso siempre, estamos rechistando que por qué tenemos que leer un libro que a lo mejor no nos gusta y encima después hacer un examen y claro ese examen cuenta para la nota, y mucho.
La segunda opinión es que los profesores nos deberían comprender un poquito más porque hay personas que a lo mejor les gusta leer pero otras cosas como, por ejemplo, libros fantásticos, de terror, dramas, etc. Pero claro nos tenemos que aguantar y leernos el libro que nos han mandado en el colegio porque después tenemos que hacer un trabajo, un examen.

También da muchísimo coraje, porque a mí me ha pasado, que a lo mejor tú te estás leyendo un libro en tu casa por tu cuenta y, de repente, dicen en el colegio que nos tenemos que leer un libro.. Entonces tenemos que dejar el que nos gusta y ponernos a leer el otro. Esto tiene después sus consecuencias: por ejemplo, que cuando vuelvas a tu libro ya no te acuerdas prácticamente de nada y tenemos que empezar a leerlo de nuevo.

Pienso que nos tendrían que dejar que leamos lo que nos gusta y no lo que nos obligan, pero claro eso sería un lío porque a la hora de evaluarlo los profesores se volverían locos. La solución podría ser que cada uno hiciéramos un trabajo, resumen o exposición sobre el libro que estamos leyendo.


Juan Imbroda:

Cuánta razón tiene esta frase. Porque: ¿Cuántas veces no nos han mandado los maestros que nos leamos libros? ¿Cuántos de ellos creíais que eran adecuados a nuestra edad?

La verdad es que estas preguntas son las que yo haría a alguien para saber qué tipos de maestros hay. La lectura de libros que están por encima de nuestro nivel, ¿pensáis que nos ayuda en algo o al revés? En mi opinión, la lectura de libros por encima de nuestro nivel lingüístico-cultural es algo que no nos beneficia en nada. Creo que hay que ir leyendo progresivamente de un nivel a otro y cada vez subiendo el nivel. Esto es algo que no hacen muchos maestros; pretenden que a un niño le guste un libro en castellano medieval, por ejemplo, cuando al niño la lectura de tal libro le parecerá tan aburrida que asociará la lectura con una actividad aburrida y sin sentido, y no con algo bonito, entretenido y que tiene un valor de crecimiento cultural, social... en nosotros importantísimo. Por eso, pienso que deben haber libros obligatorios, pero adaptados al saber del lector. Así la lectura parecerá más apetecible y como algo muy interesante.


María Victoria Molina:

Hoy en clase de lengua hemos leído un texto de Gabriela Mistral, que nadie entendía debido a su enrevesado lenguaje y que conseguimos saber de qué iba gracias al profesor.

El texto explica que es muy importante leer y esas cosas, pero a lo que voy es que decía que los profesores no ayudan a que la gente joven lea si mandan libros "pesados" en un lenguaje no muy "ameno" etc, etc...

Yo he tenido suerte con ese tema ya que sí he leído clásicos de la literatura, pero en versión adaptada.

Ahora que recuerdo, me hicieron leer "Pepita Jiménez" esta vez en versión original y reconozco que se me hizo eterno. Entre que el tema no era muy entretenido y que me costaba entender lo que ponía porque el lenguaje no era muy actual...

Un profesor que tuve recurrió a un libro llamado "Como un Espejismo" que narraba lo que sentía y veía un niño adolescente en una muchacha que iba a su pueblo de vacaciones. Para mi gusto era un pelín detallista (había una escena en la que se bañaban desnudos en un lago). Ese mismo profesor nos mandó leer también "Como Agua para Chocolate", que más o menos es del mismo estilo. Estos dos libros tuvieron tal éxito, que gente que no se había leído un libro en su vida, los leyó más de una vez.

Esta es la prueba de que lo que dice el texto de Gabriela Mistral es totalmente cierto y pienso que todos los profesores deberían tener en cuenta ese factor.


Catriel Almendra:

Estoy de acuerdo con que los profesores fallan en querer dar los mejores de los libros que existen a sus alumnos obligatoriamente. Los profesores se equivocan porque al obligar a leer un libro que a un alumno no le gusta y no lo entiende del todo, están haciendo que al alumno no le guste leer, que se aburra y no vaya a leer más. Los profesores tendrían que dar libertad de elección del libro o dejar que lea si quiere, porque leer es algo que te gusta o no te gusta.

En conclusión, al obligar a un alumno a leer un libro que no le gusta (Celestina, El Quijote...) seguramente no lea más. Yo solo leo lo que me gusta y poco a poco iré aumentando el nivel de la lectura.


Celia Pino:

En mi opinión, pienso que no es adecuado que los maestros impongan libros de temas que no sean interesantes para niños y niñas de nuestra edad.

Desde pequeño nos mandan lecturas que hace que no mostremos interés hacia ellas, por lo que llegamos a odiar la lectura desde muy pequeños y con el tiempo no hemos leído ni un libro por nosotros mismos.

Sin embargo si leemos libros de temas que nos interesen o nos atraigan, tendremos ganas de leer y leeremos, aparte de los libros obligatorios del colegio , más libros que nos gusten.

Los profesores están en su derecho de mandar libros de lecturas, pero muchas veces lo mandan para tener cultura sobre algunas historias sin pensar que de esa manera nos resultará aburrida y sin interés alguno. A veces es mejor que lo hagan de otras formas. Por ejemplo, con películas o explicándolas de una manera que sea más interesante. Pienso que así estaríamos más entusiasmados.

La lectura del colegio afecta negativamente en mi opinión porque muchos jóvenes no leen por la obligación de lecturas que no son interesantes o adecuadas para nosotros, incluso jóvenes que le gustan leer muchos no leen los libros mandados del colegio.

La lectura es una cuestión muy personal: cada persona lee según sus gustos y los temas que le atraigan.


Leila Sánchez:

En mi opinion, las lecturas para nada deberían ser obligatorias. Lo unico que se consigue con eso es el rechazo cada vez mayor de lo alumnos.

La lectura debe ser una actividad placentera y enriquecedora, y si a alguien no le resulta así, nada vamos a conseguir por el camino de la exigencia.

Si a un profesor le parece productivo mandar la tarea de leer un libro, debería ser opcional. Así, los alumnos a los que de verdad les interese la actividad sacarían provecho, ademas de nota.


Alejandro Arroyo:

Pienso que esta frase tiene toda la razón ya que siempre a los niños desde chicos se nos ha dicho que tenemos que leer para evitar: tener muchas faltas de ortografía, para aprender a expresarnos de otra manera, aprender vocabulario nuevo… Pero claro, puede llegar un momento en que resulte aburrido porque si a una persona le ponen a leer algo que no le gusta, esa persona acaba aburriéndose de la lectura hasta que la abandona. Pues esto es lo que ocurre en los maestros del colegio: obligan a los alumnos a leer un libro cada trimestre y ese libro me puede resultar interesante, pero a ti puede que no te guste y te aburras.

En este sentido quiero proponer una solución para evitar que ocurra esto. Así, en vez de poner una lectura obligatoria para todos, que sea voluntaria ya que a cada uno le gustará de aventuras, otros de terror… Cada lectura es para una edad y con un nivel de compresión determinado que debe ir aumentando a medida que vayamos leyendo más.


Adela Pascual:

Me parece buena idea que los profesores manden libros obligatorios para incentivar la lectura, siempre y cuando estas lecturas sean amenas y adecuadas al nivel de comprensión de los alumnos. En mi opinión imponer ciertas obras literarias para mejorar el interés por la lectura, supone, muchas veces, el efecto contrario en la persona a la que se obligue a leerlas. Una buena forma de evitarlo, podría ser que el profesor/a diera una lista con varios títulos de obras literarias y que el alumno eligiera, ya según su propio gusto, el libro que más le interesase.

Imponiendo cualquier tipo de lectura que no sea adecuada al nivel de comprensión del alumno, puede causar en éste desesperación, falta de motivación y, por tanto, en vez de mejorar el hábito de leer, lo que hace es que el alumno generalice y pierda el interés por cualquier tipo de lectura. Un ejemplo de todo esto, a mi entender, es La Celestina, recomendado en primero de Bachillerato. Este libro está escrito en castellano antiguo y recurre a la utilización de muchos personajes a lo largo de su desarrollo, lo que dificulta la comprensión de la trama y hace que se pierda la motivación de seguir leyendo.

Pienso que la mejor forma de solucionar estos problemas es la ya dicha anteriormente: que cada alumno escoja aquella obra literaria acorde con sus gustos personales o con su propio interés por el tema. Así se evitará el desinterés por la lectura y se dejará de ver las lecturas obligatorias como un suplicio que solamente sirven para perder el tiempo.


Alejandro Hurtado:

Yo veo mal que los profesores manden libros de lectura a los alumnos porque así no haces que el alumno coja interés por la asignatura ni por el libro, y mucho menos el hacer un examen del libro despues de haberlo leído.

Cada uno debería leer lo que le gusta sin obligaciones, invertir tu tiempo de lectura en algo que realmente te guste y no en algo que vas a hacer que la odies.

También pienso que si nos tuvieran que mandar un libro por obligación, la elección del libro debería ser mediante una votación de la clase, una elección democrática,
así la clase no se podría quejar.

En cualquier caso, creo que con leer los libros que nos gustan a cada uno yo creo que es suficiente.



Evidentemente, también nos interesa la tuya. Si quieres aportar tu granito de arena a este debate, déjalo en los comentarios.

Fuente de la imagen: Wikimedia.

Inmigración e integración

Entrevista de Fanny Pichardo en la se que habla sobre inmigración, integración y añoranzas.





La cara más "feliz" de la crisis

En momentos en los cuales muchas familias españolas están con el agua al cuello por culpa de los gastos y de la crisis que asuela nuestro país, hay personas que viven y pintan el mundo como si fuera de color de rosa.



Hasta ahora nada nuevo. Lo extraño y degradante a la vez es que personas, sabiendo la época en la que vivimos, acepten realizar determinados programas en los que airean sus "lujos" y su "spermegafashion" nivel de vida en un mes difícil para todos los españoles: Diciembre.

Y es que el reportaje en sí es muy llamativo y demuestra el gran trabajo de los profesionales de la televisión, pero muchas personas coinciden en que el mes para emitirlo no fue el más adecuado.

No había tienda en la que nuestra famosa protagonista no se probara algún modelito, ensalzando la figura de diseñadores "divinos de la muerte" que por una camiseta con cuatro garabatos pueden cobrar 350 euros o más. ¿Arte? ¡Pues sí que ha cambiado el arte!

Y ya si hablamos del lenguaje...¡Da para escribir tres artículos! "Divino" "Chic" "Fantástico" "Cool" y demás fueron las palabras usadas con mayor frecuencia en el reportaje, algo que cansaba y enfadaba (se acumulaban demasiadas cosas ya) a muchos de los espectadores que prefirieron cambiar y llorar con la cadena de la tristeza, según la competencia. Pero llorar al menos sin ruborizarse por lo que se estaba emitiendo en la cadena del lujo y riqueza.